piscina relajante, entorno tranquilo, precioso jardín

La conexión a wifi necesita mejorar, ¡es frustrante no poder usarla bien!!! Además, la falta de ventilación en el baño es algo a considerar, incómodo para un lugar con tanto potencial.

Las camas son cómodas y el desayuno es fantástico y generoso. La habitación tiene acceso privado directo desde el jardín, lo que resulta ideal para estar con niños.

La alcachofa de la ducha en nuestra habitación estaba un poco baja, a 1,85m más o menos. El acceso desde Villafranca es un poco confuso si no usas Google Maps, pero una vez dentro, el lugar es precioso.

Desayuno espectacular y atención impecable.

Marta y Magnus son unos anfitriones excepcionales, brindando un ambiente cálido y acogedor. La habitación que ocupamos era hermosa y muy cómoda, y disfrutamos de un desayuno delicioso con huevos frescos de sus propias gallinas. Además, la clase de cocina en la que participamos fue una experiencia inolvidable, aprendimos a hacer una paella exquisita y a disfrutar de excelentes vinos locales. Las vistas desde la piscina son simplemente impresionantes.

Desearía haber podido quedarme más tiempo.

El desayuno espectacular y la piscina de agua salada fueron geniales. La habitación tenía separación del baño sin ventilación.

excelente estancia con cuidados detalles

La atención de Marta y Magnus fue excepcional, siempre disponibles y dispuestos a ayudar en lo que necesitábamos. Disfrutamos mucho del desayuno en la terraza, que era variado y delicioso, y la clase de cocina fue una experiencia educativa y divertida. Además, la piscina de agua salada ofrecía unas vistas impresionantes que disfrutamos al máximo.

Aunque la conexión a wifi podría mejorar en ciertas áreas, no afectó nuestra experiencia general.

La piscina de agua salada fue un verdadero lujo, ideal para relajarse tras un día de exploración. Marta y Magnus, siempre amables, hicieron que nuestra estancia fuera especial, aunque la conexión a wifi a veces fallaba. El desayuno en la terraza era delicioso y variado, un placer cada mañana.

Un lugar encantador para desconectar

Estuvimos un finde genial! La atención de Marta fue lo mejor, siempre una sonrisa y dispuesta a ayudar. La habitación, súper espaciosa y cómoda. El jardín era perfecto para relajarse. Un pequeño detalle, la conexión a wifi a veces fallaba un poco. Aún así, todo fue increíble, especialmente el desayuno en la terraza.

Tuvimos una estancia muy agradable, destacando la limpieza y la atención personalizada de Marta y Magnus. Sin embargo, la alcachofa de la ducha en nuestra habitación estaba un poco baja, lo que puede ser incómodo para personas altas. Aun así, disfrutamos de un delicioso desayuno y un jardín que es un verdadero remanso de paz.

La atención de Marta y Magnus fue realmente sobresaliente, brindándonos un entorno acogedor y lleno de detalles únicos. Cada mañana disfrutábamos de un desayuno con huevos frescos de su gallinero, rodeados de vistas espectaculares a los viñedos. La piscina de agua salada era un verdadero lujo, ideal para relajarse después de un día explorando la zona tranquila y apacible.

La conexión a wifi podría ser mejorada en algunas áreas durante nuestra estancia, aunque no afectó significativamente nuestra experiencia.